La crisis del COVID-19: algunas lecciones para América Latina

Después de la crisis financiera internacional (2007/2008) la economía no ha vuelto a ser la misma y 20 años después, continuamos padeciendo los efectos colaterales en la economía mundial (desaceleración económica con muy bajos tipos de interés y hasta en negativo). Ahora con la pandemia mundial del COVID-19 (popularmente conocido como "el coronavirus") ha puesto de cabeza a casi todo el planeta, dejando ver las carencias  de los sistemas públicos de salud por el mundo (muchos de ellos consecuencia de los recortes derivados por la aplicación de políticas de austeridad). En la siguiente imagen, se puede apreciar que el COVID-19 ha causado una importante caída en los mercados mundiales, que sólo se compara con el estallido de la burbuja de las puntocom (en el año 2000) y la crisis financiera mundial (2008).

Fuente: McKinsey

En un post anterior, se habló sobre las pandemias epidemiológicas y sus consecuencias económicas. Hoy vamos a tratar, las consecuencias esperadas del COVID-19 sobre los individuos, los bancos y las empresas.

El COVID-19 y la economía del comportamiento

Sobre los individuos, el COVID-19 ha demostrado lo irracional que pueden llegar a ser las personas, un ejemplo de ello, fueron las compras de pánico de papel de baño alrededor del mundo sin ningún fundamento. Al parecer esto se debió al síndrome de FOMO (del inglés fear of missing out) que no es otra cosa que el temor a dejar pasar o temor a perderse algo.

Otro detalle interesante que presenciamos durante la presente crisis, es que los individuos exhiben lo que la economía del comportamiento llama "aversión a la ambigüedad", es decir, el temor a la "incertidumbre desconocida" en la evaluación de los riesgos para la salud. Para explicar mejor esta aversión a la ambigüedad, tomemos como ejemplo la siguiente encuesta realizada en varios países (Reino Unido, Italia, Alemania, China, Estados Unidos y Francia), que preguntaba: ¿Qué tan probable o improbable es que alguien cercano a usted esté infectado por el coronavirus?. En color azul tenemos la respuesta cuando se les preguntó el 27 de febrero de 2020, en color naranja la respuesta el 12 de marzo del mismo año, se aprecia claramente, como en tan sólo dos semanas, había cambiado de manera significativa las percepciones de contagio por COVID-19. Sin contar China, la media del sesgo cognitivo de los 5 países es de 17,2 puntos.

Fuente: LSE Business Review

Ahora bien, cuando se habla de pandemia, se entiende que hablamos de un riesgo de salud y si hablamos de crisis, hablamos de un riesgo de recesión económica. Actualmente, se maneja ya se está refiriendo a la pandemia como la crisis del coronavirus, ya que los individuos parece que están más preocupados por cómo será la situación económica después de la pandemia, que el riesgo de contagiarse durante la misma, es decir, el coronavirus está generando una ansiedad económica, la cual se alimenta por la probabilidad de ocurrencia de una recesión económica a largo plazo. Un reciente estudio, documentó el aumento de las ansiedades económicas de los individuos con búsquedas en Google y datos de encuestas, donde los encuestados tendían a sobrestimar la mortalidad y el contagio del COVID-19, pero subestimaron la naturaleza no lineal de la propagación de las enfermedades infecciosas. La siguiente figura muestra la evolución de las creencias en Estados Unidos sobre la gravedad de la crisis y las preocupaciones económicas entre principios y mediados de marzo.

Fuente: Fetzer et al. (2020).

Algunas consecuencias del COVID-19 sobre la educación

Un tema relacionado con las familias y del que casi no se habla (yo al menos no he visto/leído mucho al respecto) es sobre las consecuencias del cierre de colegios que ha afectado a millones de niños en el mundo. Se trata de una interrupción del sistema educativo sin precedentes, no solo por el número de afectados, si no también por su duración, lo preocupante es que este cierre de colegios podría perjudicar el rendimiento escolar futuro. Artículo muy recomendado para aquellos que son padres o trabajan con políticas educativas: El coronavirus y los niños.

Artículo relacionado: El futuro ya está aquí: docencia virtual en tiempos de pandemia

La importancia de actuar a tiempo

La crisis del COVID-19 podría desencadenar una crisis financiera, ya que dependiendo de su duración, muchas empresas no van a resistir las bajas o nulas ventas y vendrán las quiebras y cierres. Por su parte, la banca privada racionará el crédito por un problema de riesgo crediticio y de capital bancario. Aquí, se enumeran algunos aspectos a tener en cuenta sobre el papel de la banca (pública y privada) en esta crisis del COVID-19 en un escenario como este.

En mí opinión, será un hecho que presenciaremos caídas catastróficas en la economía, pero será diferente el impacto según el país y las políticas (económicas y de contención sanitarias) que hayan decidido llevar a cabo y en el momento adecuado (implementación de acciones, medidas, políticas, según cada etapa de la pandemia).

Recordemos que las etapas de la pandemia son las siguientes:

• Etapa 1. Pequeño número de casos identificados y sin transmisión local sostenida
• Etapa 2. Propagación de la enfermedad y transmisión local sostenida
• Etapa 3. Acción del gobierno/cambio en el comportamiento del público
• Etapa 4. Crecimiento de los casos/sistemas de salud ampliados
• Etapa 5. Caída de casos nuevos, reanudación de la actividad

Aquí les dejo el Plan estratégico de preparación y respuesta COVID-19: Directrices de planificación operacional para apoyar la preparación y respuesta de los países. Que es el borrador al 12 de febrero de 2020, que fue el único que encontré. Acá el microsite de COVID-19 preparedness and response planning de la OMS.

En el momento que escribo esta entrada, se asume que China ya ha superado la propagación del virus y tiene ya todo bajo control, es decir, ya se encuentran en la etapa 5 y la buena noticia es que casi todos los grandes bancos esperan una fuerte recuperación en la segunda mitad del año y también crecimiento económico durante 2021, es decir, una vez acabe la crisis del coronavirus, todo debería estabilizarse en los próximos meses. En general, se basan en como parece que está evolucionando la economía china una vez que ha finalizado la cuarentena y la gente vuelve a su ritmo habitual. Fuente: Los grandes bancos prevén caídas catastróficas en la economía por el coronavirus.

En los siguientes gráficos, se muestra primeramente la evolución del brote de COVID-19 en China hasta el momento en que decae la aparición de nuevos casos, el gráfico que le sigue, muestra como se aplana la curva de la epidemia.

Brote de COVID-19 en China (número de casos recientemente confirmados)

Casos recientemente confirmados en China (excepto en la provincia de Hubei)

Por tanto, China se ha convertido en un referente de experiencias y lecciones para ayudar a evitar el colapso económico. Sobre la base de las respuestas políticas del gobierno chino, los autores de un estudio resumen, lo que ellos consideran como las principales lecciones y experiencias para los responsables de las políticas públicas:

1. El tiempo es crucial. La política de primer orden es detener el brote y evitar que se extienda por las regiones utilizando todas y cada una de las medidas de salud pública de emergencia. Los gobiernos deben promulgar políticas de aislamiento para asegurar el distanciamiento social y utilizar cuarentenas estrictas. 
2. Es necesaria la transparencia de la información. El Gobierno de Wuhan perdió tres semanas preciosas que podrían haberse dedicado a prevenir el brote debido a las medidas de crisis de salud pública y los sistemas de información defectuosos. La utilización de la tecnología digital, el big data y las tecnologías de computación en nube podrían ser muy útiles para proporcionar información precisa y en tiempo real para superar la desinformación, la falta de comunicación y las demoras en la presentación de informes.
3. Las políticas macroeconómicas "cueste lo que cueste" son fundamentales. Para evitar un posible colapso económico después de esta crisis de salud pública, el gobierno chino no sólo proporcionó apoyo fiscal, sino que también creó políticas monetarias y financieras para evitar una recesión macroeconómica debido a choques inesperados de demanda y oferta. El ahorro de las PYMES ha demostrado ser un paso muy estratégico para impulsar la demanda interna, las redes de producción y la cadena de valor mundial.

Otros casos de "éxito":

• Corea, el ejemplo para controlar la epidemia que España no siguió. El país asiático consigue una drástica reducción del número de casos sin necesidad de cerrar grandes ciudades.
• Coronavirus: ¿cómo lograron Taiwán, Hong Kong y Singapur controlar el brote? Estas tres naciones lograron sobreponerse al covid-19 a pesar de estar muy cerca de su epicentro.
• La economía de Start/Stop como solución definitiva para salvar la crisis del Coronavirus: Dinamarca ya la aplica.
• Coronavirus: Así enfrentaron la epidemia algunas ciudades asiáticas muy pobladas. Las estrategias de Singapur, Taiwán y Hong Kong han tenido hasta ahora resultados exitosos. Pero estas tácticas podrían ser imposibles de replicar en Estados Unidos y Europa.

Consideraciones finales

La mayoría de los líderes europeos se arrepienten de no haber actuado en tiempo y forma frente a la pandemia del COVID-19, no es la primera crisis que la Unión Europea actúa cuando el problema es grande y no cuando se pudo haber hecho frente con una política coordinada entre los miembros. Por su parte, América Latina tiene la ventaja de ser la última región donde ha desembarcado el COVID-19, lo cual le da la ventaja de actuar con un margen de maniobra que otros países no tuvieron (saben qué deberían de hacer, cómo y cuándo). Esperamos que la región sepa aprovechar este margen de maniobra que no tuvieron los europeos.

Dos cuestiones clave para el éxito frente la crisis del COVID-19:

1. Durante la pandemia: informar y educar 'extremadamente bien' a la población (fundamental el uso y aplicación de herramientas para el análisis de big data a tiempo real).
2. Después de la pandemia: Si partimos de que el impacto económico esperado a corto plazo, dependerá en gran medida de las expectativas de la gente sobre el efecto general, y el grado de incertidumbre del mismo (News and uncertainty about the economic fallout of COVID-19). El punto 1, será el punto base para un buen arranque de la economía después de la cuarentena.

Aquí, un buen ejemplo, lo de realizar un estudio para conocer las expectativas de los consumidores y en base a los resultados trabajar el diseño e implementación de políticas que ayuden a reactivar la economía: COVID-19 Crisis. McKinsey consumer survey insights.

Finalmente, está claro que las políticas públicas tendrán un papel muy importante sobre la crisis del COVID-19. Sin embargo, independientemente de cómo actúe el Estado, toda industria necesita responder a la crisis, y para ello, las empresas necesitan contar con un pensamiento resiliente, es decir, las empresas tienen que aprender a trabajar con escenarios plausibles, desarrollar sus estrategias pensando siempre en "prepararse, resistir y recuperarse" ante los escenarios más adversos y está crisis ha puesto en primer lugar la importancia de implementar la transformación digital de las empresas sin importar su dimensión, ni tamaño. Pero ese tema, ya será para un próximo post.

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Como citar esta entrada del Blog:

Zorrilla-Salgador, J.P. (2020). "La crisis del COVID-19: algunas lecciones para América Latina". Blog El Analista Económico-Financiero, 23/03/2020. Recuperado de https://elanalistaeconomicofinanciero.blogspot.com/2020/03/algunas-lecciones-aprendidas-de-la.html