Columna invitada: Entendiendo la migración en la zona fronteriza de México-USA

Hoy inauguramos una nueva colaboración especial, firmada bajo el seudónimo Con Acento, que nos brindará una perspectiva de las cosas que suceden en el lado estadounidense de la frontera con México. El post de hoy trata de explicarnos el porqué de las caravanas migrantes y lo que se podría ver venir en México.

A partir de la salida del presidente Donald Trump, (quien ha sido uno de los más feroces defensores de los límites fronterizos estadounidenses) se experimentó el resurgimiento de caravanas migrantes de centroamericanos en la frontera sur de los Estados Unidos, en cantidades que solo vimos en el inicio de la nación americana a principios del siglo XIX. Donde grupos de europeos, principalmente ingleses, alemanes y franceses, invitados, llegaron en millones a las costas de las 13 colonias, en el que surgiría una ocupación territorial, al establecerse estas familias, extendiendo así los límites de las primeras colonias americanas y dando nacimiento a nuevos estados que terminarían unidos en una gran nación. Para 1920, los Estados Unidos de América contaban ya con una población que sumaba 33 millones de nuevos habitantes, en su mayoría inmigrantes.

Esa sería la primera gran ola migratoria en los Estados Unidos de Norteamérica. Sin embargo, las caravanas migrantes de hoy en día se aprecian desbordantes, ya que en los años últimos 50 años, los inmigrantes intentaban cruzar la frontera sur de los Estados Unidos en grupos de 20 o 30 personas, mientras que hoy los vemos cruzar en grupos de 200 a 300 individuos de todas las edades y por diferentes medios, se habla del ingreso de 2 mil personas al día. El resurgimiento de las caravanas migrantes, se observa a partir del cambio del discurso presidencial de Donald Trump "levanten los muros y aléjense", al “Welcome to América” de Joe Biden.

En un inicio este flujo migratorio que nos sorprendió, lo observamos como una crisis humanitaria, donde suponíamos que seguramente los individuos por sus escasos recursos y violencia que enfrentan en sus países de origen, toman la decisión de exponerse a cientos de peligros en su camino al sueño americano, más, conforme pasaron los días, pudimos ver en los medios de comunicación que las caravanas estaban fundadas, no sólo con equipo de transporte, sino que también contaban con fondos económicos depositados a través de tarjetas de débito con los que algunos líderes de caravana disponían, tarjetas ligadas a nombres de candidatos demócratas como Beto O'Rourke.

El saber que los Estados Unidos tiene un sistema de salud pública carente de soporte a la población y endeudado, sin posibilidad de sobrevivir más que un par de décadas, ya que el 40% de la población americana es mayor de 55 años, y casi el 20% es menor de 15 años, deja muy en claro que la fuerza laboral estadounidense, no tiene la capacidad para sostenerse después del año 2030, con esto dicho, el ingreso de trabajadores jóvenes inmigrantes con salarios mínimos, los cuales aportaran rápidamente a la seguridad social, puede ser visto como una estrategia de cambio de las estadísticas en la fuerza laboral que hoy en día, no llega ni al 40%. Aunado a que esta generación se caracteriza por que los viejos se encuentran en casa, cuidando de niños, que los padres jóvenes de 20-40 años no pueden sostener porque se encuentran en situación de incapacidad, consecuencia del consumo de drogas.

Mientras, se ha invitado a los migrantes a cruzar por México en autobús por las franjas fronterizas como la de California, que resulta algo contra lógico, si puedes cruzar por una frontera con menos kilómetros por el lado del Golfo de México y no por la distancia más larga por el lado del pacífico, se podría pensar que existe un plan y una logística detrás de esta migración estudiada, que no es crisis humanitaria, sino más bien pareciera una estrategia migratoria, ya que, mientras se le ofrece un empleo con salario mínimo, a una persona hispana con escasa educación, por la otra parte, se invita a un estadounidense mayor de 55 años a emigrar buscando su jubilación en tierras del caribe desde el Istmo de Tehuantepec en México hasta Panamá.

Por ello, mientras las noticias nos hablan de los centroamericanos cruzando la frontera sur, por el otro lado, millones de estadounidenses están cruzando la frontera sur con destino a México y Centroamérica, no como turistas, sino para establecerse como residentes permanentes, en clima paradisiaco, con comodidades de ingreso medio, que no alcanzaría un norteamericano de ingreso bajo en los EE.UU., así como el acceso a un mejor sistema de salud en América en cuestión de calidad-precio liberando la carga del sistema de salud estadounidense y  las empresas aseguradoras.

Desde el 2012, países como México, durante la presidencia de Felipe Calderón, ofreció a Obama, estos sistemas de salud en México y terrenos en la playa, para los estadounidenses, haciéndose el mismo Calderón un gran inversor en el estado de Campeche, gracias a la información privilegiada con la que contaba en su momento, ya que desde ese entonces, se proyectaba la creación de un sistema ferroviario que conectaría con 19 ciudades para extranjeros estadounidenses de la tercera edad, aligerando así la carga del sistema de pensiones norteamericano, el cual como la mayoría de los países, ya se enfrentan al problema y desafío de proveer servicios médicos a personas, que estadísticamente, ya viven hasta los 82 años.

Con esto dicho, no te sorprendas cuando visualices el cambio, en millones de personas extranjeras en la zona del Corredor-Canal del Istmo de Tehuantepec hasta el Canal de Panamá, porque esta zona es la nueva "ocupación" en México, Centroamérica y el Caribe; en donde más nativos americanos terminarán siendo desplazados, para tomar sus tierras, o usarlos para sostener una mano de obra barata que aporte a la seguridad social en Estados Unidos.

Como vemos, Peña Nieto siguió el plan de Calderón en México de privatizar playas y vender tierras con reservas naturales, y hoy Andrés López continúa dando seguimiento a lo trazado desde hace muchos años atrás: instalando un tren con la capacidad de transportar a los nuevos ciudadanos extranjeros entre las nuevas ciudades como Ciudad Mujeres, Paxifica City, Ciudad Maderas, etc., ciudades que hoy se construyen específicamente para la jubilación de estos residentes permanentes, en el ecocidio más grande en la historia de México y posiblemente de la América Central.

 

Con Acento.