Fases del proceso de fomento del emprendimiento y cadena de financiamiento

Hoy hablaremos de las distintas fases del proceso del emprendimiento y como esas fases van de la mano de la cadena de financiamiento. Primeramente, es importante definir las 5 fases por las que atraviesa el proceso del emprendimiento:

1. Sensibilización: Es la promoción a través de diversas actividades con el propósito de fomentar la cultura emprendedora y de la innovación. En esta etapa se busca concientizar a las personas del valor y la importancia del emprendimiento, motivando a la acción. Cabe destacar, que en términos de fomento del emprendimiento femenino, esta etapa debe considerar un énfasis en sensibilización del ecosistema sobre el empoderamiento femenino, su importancia e impacto en la promoción de nuevos negocios dinámicos liderados por mujeres.
2. Identificación: En esta etapa se identifican y reconocen las oportunidades, problemas o necesidades del mercado a través de técnicas de observación, investigación, etnografía, caza-tendencias (cool hunting), estudios de prospectiva tecnológica e industrial, patentes caducadas, análisis de clústeres, pensamiento de diseño (Design Thinking), entre otras técnicas, para posteriormente diseñar una idea de negocio básica enfocada a la diferenciación de la oferta de la competencia, definiendo una propuesta de valor clara y concreta, diseñando bocetos de productos factibles y se construyendo prototipos de los productos y/o servicios, se desarrolla el prototipo funcional o producto mínimo viable de forma rápida y económica (Lean Startup), estableciendo el grado de madurez de la iniciativa empresarial y su posición en el entorno, identificando las competencias medulares (Core Competences) del equipo de trabajo. Este es el primer paso de exploración de un emprendedor/a alrededor de una idea de negocio, donde se validan las hipótesis (o supuestos) respecto a las necesidades de o la cliente, al contexto de consumo y al modelo de negocios a implementar.
3. Formulación: En esta etapa se potencia el grado de madurez de la iniciativa empresarial a través del diseño del modelo de negocio diferenciado, servicios de prototipo industrial versión comercial y laboratorios, para ser validados con pruebas de concepto del producto, en las que se confronta en términos reales si el producto o servicio prototipado, cumple con las necesidades de los y las clientes y la definición de modelo de negocio (fuentes de ingresos, procesos clave, canales de distribución, alianzas estratégicas, relación con los y las clientes, recursos clave, gastos), recibiendo al mismo tiempo acompañamiento técnico con procesos de mentoría (Mentoring) para el diseño de la estrategia y de la visión del negocio de largo plazo (Coaching) preparando emprendedores/as para la gestión de recursos de capital semilla (elevator pitch), articulándose con redes de contactos (Networking) y redes de colaboración con otros y otras emprendedoras (Co-working). En esta etapa es mucho más importante la focalización de acciones hacia el diseño diferenciado del modelo de negocio que a la formulación del plan de negocios (vida útil reducida).
4. Puesta en Marcha: Aquí deben considerarse servicios que apoyen el comienzo de la operación en el mercado de los negocios, desarrollando procesos de gestión comercial. Es la etapa en la que se valida y se realizan ajustes permanentes para asegurar la innovación en el modelo de negocio con base en la información que obtiene en el mercado, se diseñan estrategias y se conforman juntas directivas o consejos asesores, se definen procesos y procedimientos de la empresa, se gestionan entes proveedores, aliados y asesores/as especializados/as en temas gerenciales, financieros, técnicos y comerciales, buscando la generación de un flujo de caja que permite mantener las operaciones de la empresa. En esta etapa es necesario que el plan de negocios se aterrice a través de herramientas como el Balance Score Card.
5. Aceleración: Maximización del valor agregado de la compañía a través de la internacionalización y la innovación, orientando esfuerzos a consolidar el crecimiento sostenido de la empresa, a través de la búsqueda de socios estratégicos, atracción de capital (mentoría de entrenamiento para gestionar recursos de fondos de capital privado) y búsqueda de nuevos clientes/as a través de redes de contactos internacionales (diáspora). La aceleración de empresas comprende el incremento en la velocidad de ejecución y consecución de resultados de la gestión directiva, comercial, administrativa, financiera, tecnológica y de recursos humanos de una empresa, alineados a una serie de objetivos y estrategias de negocio en un espacio de tiempo determinado, implementándose mejoras en la productividad, competitividad, calidad, logística, expansión comercial, entre otros.

Dichas fases deben ser acompañadas por “servicios financieros” que responsan a las necesidades de financiación en cada una de las etapas del emprendimiento. A continuación, se exponen los principales conceptos de la cadena de financiamiento en el proceso de fomento emprendedor:

• Capital personal y pre-semilla. Son recursos que se utilizan para el desarrollo de un emprendimiento y que se destina principalmente para estudio de mercado, desarrollo de prototipos, propiedad intelectual. Este tipo de capital normalmente se obtiene de ahorros personales, prestamos de amistades y familiares. Sin embargo, pueden existir recursos de entidades de públicas y privadas reembolsables y no reembolsables para este fin, los cuales deben ser fortalecidos dado que gran parte de la población cautiva para desarrollar emprendimientos no cuentan con dichos recursos.
• Capital semilla. Tiene como fin el lanzamiento de producto, inicio de operaciones, diseño del modelo de negocio, asesoría técnica, formulación plan de negocios, coaching y mentoría. Puede ser promovido desde el ámbito público y/o privado.
• Capital para desarrollo. Son recursos para el desarrollo, crecimiento y expansión de la empresa y que le permite a las empresas apalancarse: servicios financieros tradicionales (créditos, factoring, leasing) Proveedores/as, etc.; Capital Riesgo: Ángeles Inversores/as, Fondos de capital de riesgo, etc.; así como los impulsa el sector público como: Banca de Desarrollo, Fondo Nacional de Garantías, entre otros.
• Capital para consolidación. Se trata de recursos para la consolidación y expansión de la empresa incluyendo: servicios financieros más especializados, Fondos de Capital Privado, Mercado de Valores, etc.

Fuente: CAF (2019). Módulo III. Fomento del Emprendimiento Liderado por Mujeres, en Desarrollo empresarial con perspectiva de género: modelo de intervención y herramientas para mejorar la productividad empresarial de las mujeres [MOOC - Miríadax].