Tiran el plátano que paga Europa

Hace un tiempo atras escribi un post sobre la producción platanera en Europa, hoy se ha publicado un artículo sumamente interesante en el períodico "El Día" que nos hace pensar en el actual modelo económico, y su postura en las subvenciones agricolas:

Hay imágenes que no necesitan explicaciones y ver cómo la fruta de la que depende en gran medida la economía de una Isla se tira en los vertederos porque los precios que se pagan en el mercado no dan ni para sufragar los costes de su transporte es una de ellas. Desde junio, La Palma es testigo de una dura realidad para los agricultores plataneros, la denominada pica, o dicho de otra manera, se clasifica la fruta, se empaqueta y, en vez de enviarla al puerto, se tira en un contenedor (y van cientos) con destino a un vertedero.

Los datos son escandalosos. Según ha denunciado la Plataforma Agraria (Palca), de esta manera se han inutilizado 8.430.000 kilos de plátanos en Canarias desde el 1 de junio hasta hoy (4.137.000 kilos sólo en La Palma). Traducido a euros, más de 9 millones en pérdidas, por bajos precios e inutilización, de los que el 50% corresponde a agricultores palmeros.

Estos números han hecho saltar las alarmas de las asociaciones de agricultores. Aspa, a través de Miguel Martín, y Palca, con Amable del Corral, reclaman un cambio de modelo, una reestructuración del sector que corrija esta tendencia autodestructiva. Se piden medidas estructurales para evitar que el sistema actual termine por virarse en contra de los propios cosecheros. Cuando afloja el bolsillo, surge el fantasma de la reestructuración, con una crítica anexa ante lo que consideran es una mala planificación comercial por parte de Asprocan.

Cobrar por no vender.- Dejando a un lado la crisis económica que invita a no desperdiciar recursos, ¿cómo se entiende un sistema que subvenciona un plátano que termina en el vertedero? Es el gran tabú del sector. Para el ciudadano de a pie, el que no es platanero, resulta, cuanto menos, cuestionable que cada kilo de esos que se va al basurero reciba una subvención de 0.35 céntimos de euro. Sí, Europa paga por no vender. Es un sistema basado en políticas de supervivencia para un sector que sin ayudas ya habría desaparecido.

Cuando se le pregunta a los agricultores, muchos agachan la cabeza, otros dicen que es normal. Nadie termina de entenderlo, pero lo asumen como necesario, los que más pierden y los que menos. Es una cuestión de ahorrar costos. El kilo embarcado cuesta 0,35 céntimos de euro y es preferible tirarlo. Se conforman con la subvención, por lo menos en los meses que dure el proceso de pica, que se prevé hasta finales de agosto. Es un dinero garantizado que se recibe a través del Reglamento POSEI, aunque no se venda la producción, porque lo que se tiene en cuenta es un cálculo histórico referido a la producción media del año 2001 al 2005. Algunas voces, como la de Miguel Martín (Aspa), entienden que el problema es estructural, desde la Administración hasta el propio sector, Al respecto, reconocen que "no se puede por un lado tirar plátanos y por el otro pedir subvenciones".

Sin alternativa.- En el seno de Asprocan el mensaje está claro. Su gerente, Enrique Álvarez, dice que "Europa tiene que proteger al sector, sobre todo cuando por otro lado está permitiendo que la banana americana ocupe el mercado natural del plátano canario. De no ser así, de no subvencionarse incluso si no se vende, sería una ruina". Además, hablan de que no hay otra alternativa: "Si no se vende, ¿qué hacemos?, no hay donde colocar la fruta. Es una pena que se tenga que hacer eso para poder sobrevivir".

Al respecto, Álvarez recuerda que desde al década de los 80 se ha hecho pica, "incluso más que hoy, porque sólo se podía ir a un mercado limitado. Es una práctica de toda la vida".